El poder de la empresa familiar
Es asombroso pensar que cerca del 90% de las empresas son de propiedad o están controladas por una familia. Está claro que, aunque las empresas familiares tienen su cuota de conflictos y problemas, tienen un alto índice de éxito. Estas son algunas de las posibles razones por las que las empresas familiares tienen éxito:
Decisiones más rápidas
En una empresa o un negocio estatal, las grandes ideas suelen perderse en el proceso burocrático. Cuando el progreso y la creatividad se ven sofocados, esto puede restringir las oportunidades de crecimiento. Una empresa familiar no suele tener un gran proceso burocrático y, por lo tanto, puede implementar cambios positivos más rápidamente.
Esto no sólo se aplica a la innovación y la creatividad, sino también a la resolución de problemas y soluciones. Los problemas pueden minimizarse cuando se abordan rápidamente dentro de una empresa. Las empresas familiares suelen estar mejor equipadas para afrontar rápidamente los problemas.
Experiencia relacional
Aunque los miembros de la familia pueden tener desacuerdos a veces, suelen ser capaces de resolverlos rápidamente. Llevan toda una vida trabajando y viviendo juntos y se conocen bien. Esto significa que los conflictos y desacuerdos suelen resolverse rápidamente y no afectan a la productividad y la cohesión del lugar de trabajo como lo harían en otras circunstancias.
Motivación compartida
Es más probable que una empresa familiar cuente con más personas motivadas por el éxito. Esta motivación común se debe a que todos trabajan juntos hacia un objetivo común. Por lo general, todos se benefician mucho más del éxito de una empresa familiar.
Las grandes empresas suelen tener dificultades para motivar a sus trabajadores para que sean productivos porque no hay mucho beneficio personal que obtener. Los trabajadores trabajan por un salario que sigue siendo el mismo tanto si se esfuerzan como si no. El reto de la motivación extrínseca es más fácil de resolver en una empresa familiar.
Rendición de cuentas
Cuando todos los miembros de una plantilla se conocen personalmente, se requiere un mayor nivel de responsabilidad. Los trabajadores de una empresa familiar suelen vivir en la misma comunidad en la que opera la empresa. Quieren que sus amigos, familiares y socios puedan confiar en ellos y creer en su producto.
La responsabilidad implícita de una empresa familiar puede crear más confianza con los clientes potenciales.
Autenticidad
Cuando alguien trabaja para una empresa, a menudo tiene que callar cosas que le molestan o en las que no cree. La empresa se pierde información vital de sus trabajadores sobre el terreno, donde tienen lugar las transacciones más importantes para el negocio. En una empresa familiar existe un nivel de familiaridad que, si se gestiona bien, puede conducir a un mejor crecimiento e innovación. Un entorno abierto que permite a las personas expresar libremente sus ideas y problemas es un entorno saludable. Este tipo de empresa tiene muchas más posibilidades de crecer y progresar gracias a una colaboración informada.
Conclusión:
Como puede ver, muchas empresas familiares tienen la receta adecuada para el éxito. Si está pensando en crear su propia empresa familiar, hágalo. Como puede ver, las estadísticas están de su lado. Dirigir una empresa familiar tiene muchas ventajas que no deben pasarse por alto.